Terrores nocturnos

viernes, 25 de julio de 2014

Theodore Robert Cowell Bundy

Theodore Robert Cowell Bundy o más conocido como Ted Bandy. Fue uno de los asesinos en serie más prestigioso. Se escondía dentro de la sociedad con una máscara de seguridad, confort y falsas bondad. Al igual que el lobo se disfraza de oveja magullada para intentar que los corderitos le dejen entrar, Ted fingía una lesión en la mano o en la pierna y suplicaba ayuda a las jóvenes que se acercaban.



Ted nació en 1946 en la institución Elizabeth Lund Home para madres solteras. Su padre era un piloto de las fuerzas aéreas que se desentendió de la madre de Ted, dejándola sola al cargo del bebe.

En aquella época ser madre soltera era una vergüenza. Sus abuelos, unos devotos religiosos, anunciaron que habían adoptado al muchacho y durante cuatro años esta mentira fue tan consolidada que Ted creía que sus abuelos eran sus padres y que su madre era su hermana mayor.

Ted hablaba de su abuelo como un ser tirano, racista, que se divertía maltratando animales y que escondía un gran arsenal de porno; Ted disfrutaba ojeando este material con su primo a escondidas. Su abuela era una mujer sumisa que acabo con un problema de agorafobismo.

Louis, la madre de Ted, se enamoró de Johnnie Culpepper Bundy esta vez finalizó en matrimonio. Le cambiaron el apellido de Ted por el de su nuevo padre y su fueron a vivir juntos. Ted tuvo cuatro hermanos, pero por mucho que se esforzara, jamás se sintió como miembro de la unidad familiar.

Era un joven avispado e inteligente, no le faltaron medios ni simpatías de quienes lo rodeaba. Su inteligencia le abrió varias puertas en la universidad, donde el trato carismático que tenía causaba efecto entre sus profesores. Estuvo involucrado en actividades comunitarias, le obsequiaron con una medalla por salvar la vida de un niño de tres años, e incluso ayudo al partido republicano en las elecciones.

Era una joven promesa, un ciudadano modelo, el hijo que cualquier madre quería tener. Nadie diría que era fachada, ya que su interior se escondía un infierno de sangre y terror.

Su gran amor y obsesión fue Stephanie Brooks, una joven que cursaba los estudios de psicología. Esta relación quebró cuando la joven se graduó y no vio estabilidad en Ted; su vida era carente de objetivos. Quizás llegó a esta conclusión por que Ted era incapaz de mantener un sólo trabajo. Sus jefes decían que no era de fiar; quizás al lobo se le estaba cayendo la piel de cordero.

Su siguiente relación fue con Elizabeth Kloepfer, una mujer divorciada que tenía una niña. Esta relación duro cinco años. Durante ese tiempo Ted se aficionó al porno duro. Años más tarde diría: “llegas al punto en que la pornografía no da para más (…) y empiezas a preguntarte si quizá llevarlo a la práctica te va a dar eso que no alcanzas sólo leyéndolo o mirándolo”. "Sucedió en etapas, poco a poco, mi experiencia con la pornografía en general, pero con la pornografía que presenta un nivel alto de violencia sexual, una vez que te vuelves adicto a ella, —y esto lo veo como una especie de adicción igual que otros tipos de adicción— comienzas a buscar todo tipo de material con cosas más potentes, más explícitas, más gráficas. Hasta llegar a un punto en el que la pornografía va tan lejos que comienzas a preguntarte como sería hacerlo en realidad"

Espiaba a las mujeres al desnudarse y cuando no hacia esta actividad, que ocupaba casi todo su tiempo, realizaba pequeños hurtos en tiendas.

Se reencontró con Stephanie, mantuvieron un pequeño romance a espaldas de Elizabeth, pero no duró mucho. Ted deseaba hacerle pagar el mismo amargo plato que ella le había dado a probar. Le llenó la cabeza de palabras como: boda, para siempre, juntos. Al cabo de unos meses se cansó y la abandonó; ella le llamó varias veces, pero para deleite suyo nunca le contestó.

Unos meses más tarde, en enero de 1974, aparecía el primer crimen. Joni Lenz de 18 años había sido golpeada y sodomizada con una pata de la cama. La joven sobrevivió con daños cerebrales.

Ted no esperaría mucho en volver a atacar, solo veintisiete días. Entró en el dormitorio de la joven Lynda Ann Healy. La golpeó y la secuestró, su cuerpo fue encontrado un año más tarde.

El verano de 1974, muchas jóvenes desaparecieron o fueron cruelmente asesinadas:

- Carla Valenzuela, su cadáver lo encontraron un mes más tarde, a su lado había otro cuerpo que no se pudo identificar.

- Nancy Wilcox, nunca se encontró su cadáver.

- Donna Mason, desapareció después de un concierto en el campus.

- Dudan Rancourt, se la vio por última vez cerca de unos jardines

- Roberta Parks, había quedado con unas amigas, nunca llegó a su destino

- Brenda Ball, necesitaba que la llevaran a Washinton, no se supo nada de ella.

- Georgann Hawkins, se fue a buscar unos libros.

- El doble asesinato de Jan Ott y Dense Naslund. Quería que las dos supieran que iban a ser violadas y asesinadas.

- Melisa Smith, hija del sheriff, se encontró el cadáver 9 días después de su desaparición.

- Laura Aimee, su cadáver estaba en el monte.

Estos asesinatos se produjeron en diferentes lugares: Washington, California, Seattle, Canadá, Utha. El continuo movimiento de Ted complicó su búsqueda. Al principio pensaban que eran asesinatos independientes, hasta que se dieron cuenta de que usaban el mismo patrón.

Varios testigos habían visto a las jóvenes hablar con un hombre que tenía la mano escayolada y necesitaba ayuda para meter unos libros en el coche, en otras ocasiones era el propio coche el que estaba averiado; siempre usaba el mismo vehiculo un volskwagen.

Las descripciones del hombre variaban, Ted tenía una gran facilidad para cambiar su aspecto, con bigote, sin bigote, pelo largo, corto. Era una persona inteligente que se burlaba de sus víctimas y de la policía.

La falsa creencia de que nunca lo encontrarían, hizo que se confiara y cometiera errores; como el que cometió con Carol DaRonch. Se acercó a ella haciéndose pasar por policía, la obligó a subirse al coche y cuando intentó esposarla, esta pudo zafarse; en el forcejeo le dio un buen golpe y el rostro de Ted sangró. Esas gotas de sangre que cayeron sobre Carol fueron importantes para saber cual era el tipo de sangre que tenía el atacante.

La misma noche que atacó a Carol, al verse frustrado, volvió a por Debby Kent, sus padres la buscaron, pero lo único que encontraron fueron las llaves de las esposas con las que Carol se había presentado en la policía.

En 1975 la sed sangre continuaba y sus víctimas crecían.

- Caryn Campbell, violada y brutalmente golpeada, su cadáver apareció a kilómetros del hotel donde se alojaba.

- Aparece el cráneo de Brenda Ball y trozos del cuerpo de Lynda Healy, Susan Rancourt, Roberta Parks y Donna Mason.

- Julie Cunnigham, su cadáver no ha sido encontrado.

- Dense Oliverson, iba a visitar a sus padres,desaparecida.

- Melanie Cooley, asfixiada con una funda de almohada.

- Dhelley Robertson, practicaba autostop, encontraron el cadáver el 21 de agosto.

Fue su novia Elizabeth Kloepfer o como se hacia llamar Meg Anders quien vio el retrato del asesino que buscaban las autoridades y se alarmó al ver el increíble parecido que tenía con Ted. Llamó de forma anónima a la policía, incluso mando fotos. No fue la única, Liz y Ann Rule, excompañeras del trabajo de Ted, llamaron a la policía. En ese momento existían 3.000 sospechosos y Ted no daba el perfil de asesino. Obviamente el joven, inteligente y bien relacionado Ted no podía haber realizado unas atrocidades como aquellas.

Fue casualidad que un día mientras Ted circulaba por la carretera, un agente de tráfico quisiera comprobar su matrícula. Ted en lugar de parar y ofrece su ayuda, como hubiera hecho en cualquier otra situación; se hecho a la fuga, alertando al policía. Al finalizar la persecución encontraron en su vehículo, esposas, una palanca de metal, cinta americana y varios objetos sospechosos. Todas las miradas se centraron en Ted por primera vez.

Tenía 29 años cuando comenzó su primer juicio. Ted estaba confiado de que no existía nada en su contra. No se imaginó que Carol DaRonch, la víctima que se le escapo estaría ahí para acusarle. Lo sentenciaron a cadena perpetua.

La policía de Colorado también levantó cargos en su contra al encontrarse cabellos en el coche que pertenecían a varias jóvenes asesinadas.

Después de haber estudiado derecho, fue tan engreido como para pensar que podía defenderse a sí mismo. Le permitieron ir a la Biblioteca de la corte de Aspe para consultar unos libros. Se escapó por una ventana.

Durante 6 días vivió en una caravana y lo encontraron cuando intentó robar un volkswagen.

Volvió a escapar en enero de 1997; trepó por el techo hasta otra estancia, donde esperó a que no hubiera nadie cerca y salió por la puerta de los funcionarios de prisiones. No se dieron cuenta de su desaparición hasta 15 horas más tarde.

Se cambio de nombre por el de Chris Hagen, estuvo viviendo en Chicago y en Florida.

1977 ocurrió un horrible suceso. En la fraternidad Chi Omega aparecieron muertas Lisa Levy y Margaret Bowman, la joven Kathy Kleiner pese a la gravedad de sus heridas, sobrevivió. Una de las jóvenes que volvía a la fraternidad vio salir a un hombre que llevaba una gorra azul.

Esa noche, no satisfecho, atacó a Cheryl Thomas. La golpeó hasta fracturarle el cráneo por 5 lugares. La joven sobrevivió con terribles secuelas como la pérdida auditiva y problemas de equilibrio.

El cuerpo de la joven Kimberly Leach de apenas 12 años, se encontró ocho semanas después de su desaparición.

Antes de ser detenido por última vez, volvió a tener una pequeña persecución con un guardia de trafico, quién había confirmado que el vehículo que conducía Ted era robado.

El 25 de junio de 1979, comenzó el juicio por los asesinatos de la fraternidad que tuvieron una gran presencia mediática. Ted una vez más pensó que no existían suficientes pruebas, pero había dejado un buen rastro de ellas, incluso la marca de sus dientes en la carne de una de las muchachas fallecidas.

Se le condenó a pena de muerte. Intentó por todos los medios apelar, incluso se guardo información de más asesinatos con la promesa de hacer una declaración si le aumentaban el tiempo de condena, pero fue en vano.

Llegó a defenderse si mismo en un juicio. Contaba con su don de gente, su tacto de cordero, su encanto y su carisma; pero esta vez no engañó a nadie, todos veían el sádico asesino que era.

Durante el tiempo que estuvo en el corredor de la muerte se lo pasó haciendo entrevistas, convirtiéndose en el protagonista de documentales.

Llegó a ayudar a la policía en el caso de Gary Ridgway. Su asesoramiento fue decisivo para descubrir al criminal. Ted uso esta nueva faceta para conseguir más tiempo. Incluso los investigadores del caso ayudaron a la apelación solicitando tres años más al declarar que la ayuda de Ted era valiosa. Sin embargo la apelación fue denegada.

En una ocasión un periodista le preguntó: ¿Mereces morir?. Ted respondió: pienso que la sociedad merece ser protegida de mí y de gente como yo

El 24 de enero de 1989 Ted tuvo su cita con la silla eléctrica a las 7.16 en la prisión de Starke, Florida.



Su vida quedaría inmortalizada en dos películas.

- Ted Bundy la película de 2002

- Un extraño a mi lado de 2003, basada en un libro que escribió Anne Rule, una mujer que entrevistó persona


lmente a Ted en la cárcel.